Las puertas del Ramos Carrión se abrieron este miércoles para dar la bienvenida a unos asistentes que, después de cuatro décadas, merecían su reconocimiento.
Organizamos una gala-homenaje en la que tuvimos, como eje central a Florentino Mangas, presidente de nuestra cooperativa, ya que la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, y el subdelegado, Ángel Blanco, le entregaron la Gran Cruz de la Orden al Mérito Agrario.
Florentino se mostró emocionado y desde el atril, una vez más, dio una clase magistral de sentido común y humildad. Sabias palabras de un hombre con identidad propia, hecho a sí mismo, y ejemplo para todo un sector.
Los socios fundadores, aquellos 380 valientes, fueron los que en 1982 apostaron lo que tenían, y un poco más, para conseguir que el Cobadu primitivo arrancara. A ellos se sumó el homenaje a los miembros de Extensión Agraria que, en aquel momento, empujaron sin miedo a todos los nuevos cooperativistas zamoranos.
Uno de los momentos emocionantes fue el reconocimiento a los trabajadores fundadores, los "seis magníficos" tal y como comentó Celedonio Pérez, periodista histórico de La Opinión. Caja Rural, única entidad bancaria que confió en el proyecto desde el comienzo, recogió también su insignia por un hermanamiento todavía hoy visible.
Desde Cobadu, una vez más, agradecemos el compromiso a todos los que apoyaron y sostienen la cooperativa cada día.